lunes, diciembre 15, 2014

¡Regalátelo, regaláselo! (sería un buen slogan publicitario)

Se me ocurre, no sé, no más por hacer una sugerencia, que estas navidades serían propicias para regalar SMITH. Es más económico que una planchita para el pelo o una bermuda para el verano. No tan práctico, tal vez, eso es cierto, pero... ¿desde cuándo la literatura es práctica?